Hacienda, Economía y Administración Pública

La liquidación del último Presupuesto del anterior Consell arroja un resultado negativo de 2.946 millones de euros

27/02/2024
  • La liquidación del Presupuesto de la Generalitat de 2023 refleja el fuerte aumento del gasto estructural por parte del Botànic, con un aumento de 543,9 millones en los gastos de personal y de 853,7 millones en compras de bienes y servicios en solo un año
  • Medidas como la reducción del gasto político, la simplificación administrativa o la Comisión Interdepartamental para la Eficiencia en el Gasto reflejan la acción del Consell para revertir la espiral de aumento del gasto que se encontró a su llegada a la Generalitat
  • El aumento de la deuda en 3.156 millones, un 146 % más de lo que creció en 2022, responde a la necesidad de financiar el exceso de los 3.860 millones de déficit del último año completo del Botànic en el Consell

El Pleno del Consell ha tomado razón de la liquidación del Presupuesto de la Administración de la Generalitat de 2023, el último elaborado por el anterior Consell, que arroja un resultado de -2.946,40 millones de euros.

El resultado se ve fuertemente condicionado por el notable incremento de las obligaciones reconocidas en el ejercicio, que en 2023 se han incrementado en un 11,62 %. Dentro de esa magnitud, sobresalen especialmente el aumento del 7,33 % en el capítulo I del presupuesto, lo que en cifras absolutas equivale a un aumento de 543 millones de euros en gastos de personal en solo un año.

La otra variable que aumenta de forma muy marcada en la liquidación del Presupuesto de la Generalitat de 2023 es el capítulo II (gasto corriente en bienes y servicios), que se dispara un 23,35 % y supera los 4.509 millones de euros, 853 millones más que en 2022.

El marcado aumento de estos dos capítulos y su elevado peso relativo dentro del Presupuesto de la Generalitat reflejan con claridad el fuerte incremento del gasto estructural consolidado por el anterior Consell a pesar de la desaparición de los recursos extraordinarios vinculados a la lucha contra la pandemia o la guerra de Ucrania.

Este elevado nivel de gasto consolidado, unido a la infrafinanciación derivada del retraso en la reforma del sistema de financiación autonómica, compromete el cumplimiento en los próximos ejercicios de los objetivos de estabilidad presupuestaria al suponer un elevado déficit estructural primario.

Es por ello que, desde su llegada a la Generalitat, el actual Consell ha tenido como una de sus prioridades la reversión de la espiral de incremento del gasto en la que incurrió el Consell de PSPV, Compromís y Unides Podem. Entre las primeras medidas adoptadas por el actual Consell para reducir el gasto superfluo destacan la reducción de la estructura política del Consell y los avances en simplificación administrativa.

A ello se suma, más recientemente, la puesta en marcha, en el seno de la Conselleria de Hacienda, de la Comisión Interdepartamental para la Eficiencia en el Gasto, que demuestra el compromiso del Consell con la sostenibilidad financiera de la Generalitat a medio y largo plazo.

La liquidación practicada por la Intervención General de la Generalitat corresponde exclusivamente al Presupuesto de la Administración de la Generalitat y no incluye al sector público. Por ese motivo, aunque el resultado presupuestario no financiero influye de forma considerable en el cálculo del déficit definitivo de la Generalitat en 2023, este dato no se conocerá hasta marzo.

Incremento del presupuesto de ingresos

Así, a pesar de que en el presupuesto de ingresos o derechos reconocidos netos se aprecia un crecimiento con respecto al ejercicio de 2022 de 2.562 millones de euros (un 15,77 % más), el incremento de las obligaciones reconocidas en 2.266 millones (un 11,62 % más) determina que el resultado presupuestario no financiero (capítulos I a VII) se sitúe en -2.946,40 millones de euros en 2023 frente a los -3.242,83 del ejercicio 2022.

El incremento de los ingresos obedece principalmente al aumento del 22,74 % y del 17,61 %, respectivamente, de los capítulos I y II (impuestos directos e indirectos). También crecen los capítulos IV y VII de transferencias corrientes y de capital, pero el capítulo III referente a tasas, precios públicos y otros ingresos, así como el IV (enajenación de inversiones reales), se han visto minorados con respecto a 2022 en 349 millones.

En cuanto a las obligaciones reconocidas, que en conjunto se han incrementado en el 11,62 % mencionado, la ejecución aumenta en todos los capítulos salvo en el capítulo VII (transferencias de capital), que ha sufrido una reducción de 45 millones. Por su parte, las operaciones con activos financieros (capítulo VIII) han minorado su saldo negativo en un 46,64 %, al pasar de -139,45 millones de euros a -74,42 millones.

La deuda nueva supera en 3.156 millones a la amortizada 

Por lo que respecta a las operaciones con pasivos financieros (capítulo IX), las operaciones de endeudamiento concertadas en el ejercicio han superado en 3.156 millones de euros a las amortizaciones de préstamos. En comparación con el ejercicio anterior, la diferencia entre las operaciones de endeudamiento menos las amortizaciones aumenta un 145.98%.

Este fuerte incremento de la deuda viene generado principalmente por el exceso de déficit de la Generalitat en 2022, que se financia al año siguiente al través del FLA. En este sentido, cabe recordar que el Consell del Botànic disparó el déficit en su último año completo en el Consell por encima de los 3.860 millones de euros, un 3,12 % más que el año anterior.

En cuanto al remanente de Tesorería, que refleja la liquidez de la Generalitat a corto plazo este empeora hasta -5.385 millones de euros, frente a los -4.998,6 millones del ejercicio 2022, lo que supone un incremento del 7,73 %. En este aspecto, destacan, entre otros aspectos, la reducción en 250,7 millones de los derechos pendientes de cobro, un 31,19 % menos, mientras que las obligaciones pendientes de pago suben en 194,2 millones (4,96 %).