Detalle nota de prensa - Comunica GVA
El IVAM trae a València Nobosudru, la imagen de la mujer mangbetu convertida en icono del África Negra
- La exposición ‘Nobosudru, el devenir icono de una mujer mangbetu’ explora los diferentes usos que se dio a esa imagen a partir de los años 30
- Se exhiben 80 piezas procedentes del Musée du Quai Branly de París y otras instituciones europeas, junto con abundante documentación
El Institut València d’Art Modern (IVAM) ha presentado la exposición ‘Nobosudru, el devenir icono de una mujer mangbetu. De la imagen visual a la materialidad de la imagen’, que radiografía la imagen fotográfica de Nobosudru, una mujer mangbetu, tomada en la década de 1920 en el Congo y convertida en icono del África Negra.
La exposición, que se inaugura este jueves, 4 de julio, en el IVAM Centre Julio González, ha sido presentada por la directora adjunta del IVAM, Sonia Martínez, y por los comisarios de la muestra, Hasan G. López Sanz y Nicolás Sánchez Durá.
“Esta exposición sería una suerte de caso de estudio de una imagen tomada por George Specht y León Poirier en la parte nororiental del Congo, un territorio habitado por los mangbetu, hace hoy alrededor de un siglo”, ha explicado Sonia Martínez. “La imagen de Nobosudru es una imagen producida, manipulada y tomada más tarde como un signo étnico de todas las mujeres mangbetu y como un icono del África colonial”, ha declarado la directora adjunta.
Specht y Poirier eran los responsables de las tomas fotográficas y cinematográficas de la famosa travesía automovilística Citroën, conocida como La Croisière Noire (1924-1925), uno de los raids automovilísticos más famosos de la década de 1920. Este raid recorrió aproximadamente 28.000 kilómetros de norte a sur del continente africano. “Su legado incluye un total de 8.000 fotografías, 27.000 metros de película y 15 álbumes de dibujos”, ha explicado Sonia Martínez.
La exposición, que se exhibe hasta el 8 de diciembre, reúne alrededor de 80 piezas que muestran cómo la imagen de Nobosudru se utilizó en los más diversos contextos y en usos dispares. Desde el positivado en papel en un álbum de memoria y la difusión del documental cinematográfico de la expedición, pasando por su reproducción en textos etnológicos, sellos, postales, la propaganda de productos de consumo, como en los anuncios de cajetillas de tabaco, en artes decorativas con escultores importantes como François Bazin, moda, joyas o bisutería.
La directora adjunta del IVAM ha recordado que la imagen de Nobosudru “ha llegado hasta la actualidad, al arte contemporáneo o a productos audiovisuales de masas como podría ser la película de Marvel, ‘Black Panther’, y el personaje de la gran madre, Shaka”.
Hasan G. López Sanz ha manifestado que “la imagen de Nobosudru con su característico tocado, que solo era un marcador de estatus, fue falsamente tomada como un signo étnico de todas las mujeres mangbetu”. Su imagen de perfil, donde la pose revela un cuello exageradamente alargado dispuesto por el fotógrafo para la toma, estaba influenciada por el orientalismo y por el naturalismo ya que eran los inicios de los estudios etnológicos. Esta imagen se convirtió en un icono del África Negra.
“Para entender una imagen, no busques el significado, busca el uso”, ha sentenciado Nicolás Sánchez Durá. “Con su uso en los distintos contextos la semántica de la imagen varía, y esa es la razón por la que una imagen de estirpe colonial como esta puede ser en otros contextos empleada para fines totalmente distintos”.
Para Sánchez Durá, el retrato de la mujer mangbetu, que en origen tuvo un significado etnológico, como se puede ver en las primeras publicaciones, tuvo también “un significado propagandístico del colonialismo además de publicitario, un significado derivado de la apropiación de esa imagen por parte del arte contemporáneo; incluso usos que tienen que ver con la afirmación política anticolonial”.
La misma imagen tiene “una dimensión política implícita, que es la colonial, y una dimensión política explícita, que es anticolonial, y eso depende del contexto de uso”, ha aseverado.
Así, la pluralidad de usos supuso tanto la repetición de la imagen en distintos soportes materiales, como su mutación formal y semántica. “Que esa imagen colonial prosiga su viaje, cuando abunda la crítica del colonialismo, quizá se explique por una actitud ambivalente que mezcla en proporciones variables tanto el rechazo de aquel periodo, cuanto una cierta melancolía”, ha aclarado Hasán López.
Las obras de la muestra proceden en su mayoría del Musée du Quai Branly de París, así como de otras instituciones y colecciones privadas, y se exhiben junto con abundante documentación proveniente de numerosos archivos y museos.